La acción de la carcoma hizo inservible al palo original, impidiendo la navegación
a vela.
Han sido necesarias varias semanas de trabajo por parte de una de las últimas
empresas de calafates de la región, Navaltinoc, y ha requerido notables reformas
en el puente, que ha sido adaptado para una mayor habitabilidad.
En unos días toca realizar la varada anual, en la que se realizarán los trabajos
habituales de mantenimiento del casco (pintura, patente, calafateado, etc) en dique
seco. Desde que ANSE recibiera el depósito judicial de este viejo velero construido
en 1951 en Dinamarca, las reparaciones y mejoras han sido continuas año tras año.
Gracias a estos trabajos, durante los próximos meses podremos continuar con las
actividades de seguimiento de las poblaciones de mamíferos, aves y tortugas marinas
en el litoral de la Región de Murcia preferentemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario